Tras 2 meses y medio de intensa actividad a través de 19 iniciativas rurales ejemplares, el pop-up store del Mercado de la Cosecha echará el cierre este viernes en Vigo con un balance muy positivo de la experiencia gracias al masivo reconocimiento del público.
Se estima que más de 65.000 personas han pasado por este espacio en la calle Policarpo Sanz para conocer las iniciativas empresariales y sus productos. Estas cifras avalan un proyecto que ha sido impulsado por Corporación Hijos de Rivera, R y Gadis con el objetivo de promover el desarrollo socioeconómico de Galicia y la sostenibilidad del medio rural, en este caso, a través de la divulgación y promoción de iniciativas de éxito.
Una intensa agenda de actividades
El espacio del Mercado de la Cosecha se ha convertido durante dos meses y medio en un foco de dinamización en torno al rural en pleno centro de la ciudad. Desde su apertura el pasado 15 de mayo se han celebrado un total de 55 actividades diferentes, entre charlas, degustaciones y talleres de todo tipo. Cada semana la tienda ha ido cambiando de imagen y de protagonistas, todos ellos iniciativas innovadoras que merece la pena compartir.
A lo largo de este tiempo el Mercado de la Cosecha se ha materializado como un espacio abierto a la divulgación y el intercambio de ideas y por el local hemos visto pasar desde los yogures de Casa Grande de Xanceda, a las esponjas vegetales de Ibérica de Esponjas, las mermeladas de Amorodo, los quesos de Cortes de Muar, las galletas mariñeiras de Daveiga, los huevos camperos de Pazo de Vilane, los aceites de Olei, los yogures de Arqueixal, los zuecos de Elena Ferro, las castañas de Naiciña, los helados de Bico de Xeado, la miel de Abella Lupa, el abono de lombrices de Ecocelta, las cestas de Idoia Cuesta, las galletas de Granxa Maruxa o las manzanas con las que se elabora la sidra Maeloc y las uvas de los vinos Ponte da Boga.
Gracias a esta dinámica, los ciudadanos han tenido la oportunidad de, entre muchas otras cosas, hacer quesos artesanos, conocer las historia de las galletas mariñeiras, elaborar cestas, aprender sobre la aceituna brava gallega, , catar vinos de la Ribeira Sacra, maridar mermeladas, reciclar cajas de huevos, aprender a ordeñar vacas, reflexionar sobre el “vermicompostaje” casero o conocer el proceso de elaboración de esponjas vegetales, entre otras muchas propuestas.
Ha sido una imparable sucesión de actividades y sorpresas que ha contado con el respaldo tanto de los ciudadanos de Vigo como de los múltiples visitantes que se han acercado a la ciudad, algo que, en palabras de la organización “supone un plus de responsabilidad a la hora de afrontar futuros proyectos del Mercado de la Cosecha para estar a la altura de las expectativas de la gente”.
A punto de concluir la experiencia, Cristina Fernández Armesto de Casa Grande de Xanceda afirmaba que “el Mercado de la Cosecha nos ha dado la oportunidad de dar a conocer nuestro proyecto medioambiental y nos ha demostrado que nuestra Galicia rural esta llena de iniciativas emprendedoras e innovadoras”. Por su parte, Sergio Quiroga de Ecocelta lo describe como “más que una tienda ha sido un espacio en el que escuchar a interactuar con nuestros clientes» y Juan Carlos Mascato, de Ibérica de Esponjas expresa que “gracias a los promotores que juntan diversidad de proyectos singulares para divulgar y al mismo tiempo tener la oportunidad de conocernos y compartir nuestras experiencias con los demás compañeros productores”.
